En siete
artículos anteriores, se ha visto la evolución que ha sufrido el “manejo
empresarial” para sostener su crecimiento y desarrollo. No se puede afirmar,
categóricamente, que un enfoque es mejor que otro. Cada uno se produjo como
respuesta racional y práctica a las circunstancias reinantes. Cuál es el más
eficaz dependerá de los problemas que enfrente la organización, como también
del estilo y las preferencias de sus líderes. Es más, cada uno de esos enfoques
de manejo empresarial se puede tomar para reflejar un estilo de liderazgo en
particular, cuando lo que se ve en muchas organizaciones es, en realidad, una
combinación de éstos.
Lo recomendable
es considerar cada enfoque existente como un acervo teórico y práctico, así
como una base que sea sólida para una interacción adecuada de la teoría y la
práctica. Hoy, es preferible que rechacemos el uso exclusivo de un enfoque
porque, de esa manera, estaríamos negando los otros aspectos que conforman la
compleja realidad empresarial. De igual manera, hay que rechazar el enfoque
radicalmente racionalista de cómo debería
funcionar el proceso estratégico. En este complejo y turbulento mundo de las
organizaciones, no existe “una manera óptima”, como tampoco “una mejor forma”
de organización.
Formas del todo
diferentes funcionan bien en entornos particulares. La exploración y
consideración sistemática de una amplia variedad de modelos permitirá un
conocimiento más profundo y útil del proceso estratégico. Pero, es recomendable
que usted tome consciencia de las contradicciones que existen en cada uno de
estos enfoques. Tómelo como un reflejo de la realidad; el mundo está lleno de
contradicciones. El verdadero peligro reside en la aplicación de soluciones
cómodas a una realidad matizada, no en abrir perspectivas para diferentes
interpretaciones. El estratega efectivo es aquel que tolera contradicciones,
aprende a conocer sus causas y efectos y a armonizar los aspectos contrarios,
para generar una acción eficaz.
Efectívamente, el mundo está lleno de contradicciones, y a partir de esa realidad tenemos que actuar!! Buen artículo!!
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